La Reconexión es un intercambio acelerado de energía, luz e información. En ella se concentran tres sistemas:
- Las Líneas Ley de nuestro planeta.
- Los meridianos de nuestro cuerpo.
- La rejilla de energía del Universo.
Existe la teoría de que, en un origen, los seres humanos teníamos un conjunto de líneas y puntos energéticos que estaban conectados a los canales y puntos energéticamente poderosos de la Tierra y que a su vez enlazaban a una red mayor y eterna del Universo, pero en algún momento de nuestra andadura como seres humanos estas líneas de información y comunicación que poseíamos fueron cortadas, dejándonos como resto nuestro actual sistema de meridianos que, aunque nos permite interactuar con el macro y el microcosmos a nivel de luz e información, sólo es un vestigio de lo que originalmente fue.
La consecuencia de ese corte fue ralentizar nuestro proceso evolutivo a todos los niveles al separarnos de esa inteligencia y energía. La Reconexión nos trae la posibilidad de volver a reconectarnos a ese canal de luz e información que existe en nuestro Universo y del que nos separaron.
La Reconexión sólo se efectúa una vez en la vida y nos puede ayudar a encontrar el verdadero propósito de nuestra existencia, a estar más equilibrados tanto física como emocionalmente e incluso algunas personas han descubierto que sus sentidos y percepciones se acrecentaban. No olvidemos que fue después de hacerse su reconexión cuando la vida de Eric Pearl cambió y sus pacientes empezaron a sanar (algunos de forma casi milagrosa) sin que él ni siquiera los tocara…
Se realiza en dos sesiones separadas por unas 24 horas, es decir una cada día con un ciclo de sueño en medio, dos días consecutivos. Cada una de estas partes tiene una duración aproximadamente de 45 minutos; se efectúa con la persona acostada en una camilla y, al igual que en la Sanación Reconectiva, tampoco existe ningún contacto físico. La Reconexión no puede realizarse a distancia.